En las elecciones del pasado 13 de marzo, 78 mujeres fueron elegidas para hacer parte del Congreso: 31 en Senado y 49 en Cámara. Estos son los partidos con mayor paridad.
Con casi 800 mil votos Francia es el hito de estas consultas y en general de las elecciones 2022. Una líder ambientalista, defensora de derechos humanos, negra, feminista y caucana, que nunca antes se había medido en las urnas, le ganó a los 5 hombres de la consulta del Centro Esperanza y a Álex Char. Sin duda alguna hará parte del nuevo gobierno y en los próximos días se definirá cómo entrará a las elecciones presidenciales cuando defina las alianzas y las formas de capitalizar su alta votación.
Los más de 783.000 votos que Francia Márquez obtuvo en la consulta del Pacto Histórico, y que la ubicaron como la tercera precandidata más votada, son un hito en la historia política de Colombia. Su proyecto antipatriarcal, antirracista y anticapitalista se nutre de la resistencia de base y tiene un poder transformador en el juego político.
Click acá para verLa participación de las mujeres en la política no se consolidó en curules del Senado para el Movimiento Estamos Listas, que aspiraba a ser el primer partido político de mujeres en lograrlo, pero otras 78 mujeres fueron elegidas para hacer parte del congreso (31 en Senado y 49 en Cámara, según el último boletín de la Registraduría). Entre ellas, dos mujeres palenqueras fueron elegidas: Ana Rogelia Monsalve en Cámara, circunscripción afrodescendiente por la vereda Las Trescientas y del municipio de Galapa; y Dorina Hernández en la Cámara de Representantes de Bolívar en la lista del Pacto Histórico. En la Circunscripción Indígena en Senado, también fue elegida una mujer: Aida Quilcue del Movimiento Alternativo Indígena Social, «MAIS».
En Senado, de las 102 personas elegidas el 13 de marzo solo 31 son mujeres. Una desalentadora tercera parte del total pero que evidencia un aumento en la participación política femenina en Colombia. En 2010, apenas 17 mujeres fueron elegidas senadoras, casi la mitad de lo que pasó el 13 de marzo. En 2014 la cifra subió a 23 y en 2018 fueron elegidas 25. Este aumento es el más grande de los últimos años y acerca al país a la tendencia de la región. Si bien la Ley 1475 de 2011 exige que el 30% de los integrantes de las listas de todos los partidos al Congreso deben ser mujeres, a la hora de la elección esto no suele traducirse en las curules obtenidas por ellas. Por ejemplo: en el Congreso actual, las mujeres tienen una representación del 19,7%.
En el Senado, solo el Pacto Histórico logró una lista paritaria, con 8 mujeres electas para las 16 curules que ganaron. En todos los demás partidos con alta representación, la desigualdad entre hombres y mujeres se ve así:
Entre las mujeres elegidas está Claudia María Pérez Giraldo del Partido Liberal, cuñada de Eduardo Pulgar condenado en 2021 por tráfico de influencias y cohecho. También está Ana Rogelia Monsalve, hermana del alcalde de Malambo y cuya candidatura se criticó por hacer parte de las maquinarias que se estaban jugando en el Atlántico, las del senador de la U José David Name y de Laureano Acuña “El Gato Volador”, del Partido Conservador.
Por otro lado, en la cámara de representantes, la disparidad es peor. De las 167 curules, 49 son mujeres, el 29%. Se destacan mujeres como Martha Lisbeth Alfonso, docente, ambientalista y feminista del Tolima. La líder estudiantil de la Universidad Nacional Jennifer Pedraza. Susana Gómez Castaño (Susana Boreal), directora de orquesta popular que se hizo visible por su participación en el Paro Nacional en Medellín. Y Julia Miranda, exdirectora de parques nacionales, reconocida por su lucha ambiental y el único fichaje del Nuevo Liberalismo en todo el congreso.
Los movimientos y partidos no mencionados no tienen representación de mujeres: el Mais, la Coalición Partido de la U y Colombia Justa Libres, Coalición Juntos por Caldas, Gente en movimiento, Pacto Histórico y Verdes, Partido Colombia Renaciente, Coalición Partido Cambio Radical y Partido Político Mira, Coalición Partido Conservador y Partido de la U.
La ONU ha dicho que la paridad “es un elemento central de la democracia incluyente y se ha constituido a nivel mundial en un referente para la representación política democrática”. Colombia, como otros países de la región, está pendiente de avanzar hacia una mayor participación y generación de acciones afirmativas que promuevan la paridad. La regulación es solo el primer paso para lograr un mayor equilibrio entre mujeres elegidas y hombres elegidos que por ahora no llega ni al 30% que exige la ley para la integración de las listas.
