Entre el amor y el odio hacia los memes, se sitúa esta última selección del año. Un meme por cada mes, aunque la sensación del tiempo se haya modificado profundamente en este 2020.
Este año, tempranamente transformado debido a la pandemia, dejó una impronta peculiar en el orden de las imágenes efímeras mejor representadas por la producción de memes. Como copias reproducibles y de transmisión inmediata a niveles impredecibles, esta forma de comentario instantáneo sobre la vida cotidiana y el poder político, acompañó, con una buena dosis de humor lo que devendría en distintas formas de encierro. Las relaciones que establecemos con las imágenes dan cuenta de que, a pesar de ser inertes, adquieren vida al punto que nos hacen reír pero también pueden ofendernos. Entre el amor y el odio hacia los memes, se sitúa esta última selección del año. Un meme por cada mes, aunque la sensación del tiempo se haya modificado profundamente en este 2020.
Enero de perros
Los perritos japoneses que aluden al pasado y al presente para mofarse, generalmente, de las comodidades y el aburguesamiento modernos, empezaron un año prolífico que los vio circular adicionalmente en el circuito de los stickers, muchos de ellos convertidos ahora en derivaciones del meme al conjugar texto y alguna forma gráfica. Los “errores” ortográficos le añaden, muchas veces, color al género memético y hacen un comentario crítico sobre las pretensiones, en este caso, del arte contemporáneo y su elitismo.
Febrero de Popeye
Aniquilado por el cáncer, uno de los principales personajes mediáticos del narcotráfico en Colombia, John Jairo Velásquez murió en este mes. De preso a influencer con decenas de miles de seguidores en las redes sociales, el reconocido sicario del Cartel de Medellín, Popeye, se memetizó en Febrero. La fascinación y el morbo por lo delincuencial es una característica de nuestros países, siendo lo narco el principal objeto de culto y representación en el caso de Colombia y México con particular fuerza.
Marzo de pandemia
A mediados de este mes pasamos, de un día a otro, al encierro como resultado de la expansión del corona virus. La ciudad de Bogotá se empezó a mostrar desierta y el tráfico vehicular, con su desbordada contaminación, desaparecieron. Las formas de lidiar con esta situación aludieron, reiteradamente, al incremento del uso de alcohol y pijamas, y otros cambios radicales en la vida cotidiana.
Abril de separaciones
Una de las dimensiones problemáticas del distanciamiento social impuesto ha dejado su huella en las relaciones de pareja. A ello se ha sumado, durante las últimas décadas, el consumo de drogas de diseño tales como el tusi y otras se han popularizado en ciudades como Bogotá. Una mezcla de de ketamina, analgésicos, leche en polvo y otras sustancias, sirve en este meme para comentar sobre encierro y nostalgia romántica simultáneamente.
Mayo de carriel
Los memes sirven también para hacer denuncias políticas. En este mes se presentó al Congreso Nacional un proyecto de ley para convertir a un objeto en representación de la identidad del Departamento de Antioquia. El proyecto, al ser defendido por esbirros del uribismo, fue ágilmente aprobado en el Congreso pero también rechazado por sectores críticos que han denunciado los vínculos con el narcotráfico.
Junio de Matarife
Si bien estrenada como serie televisiva en redes sociales en mayo, el eco que generara Matarife resuena con los deseos de buena parte de los colombianos por encontrar justicia y paz. La serie hace lo impensable hace pocos años: hablar del dueño del país y sus articulaciones más macabras con prácticas genocidas. Los memes relativos al caso, no obstante, revelan también los límites de la justicia en Colombia.
Julio Iglesias
Ningún mes fue tan monotemático en el universo de los memes que éste, enteramente consagrado al cantante y su persona pública con la finalidad de tratar, mediante el humor, de romper con la monotonía y la incredulidad de los primeros cuatro meses de enclaustramiento.
Agosto de gastos
Uno de los rostros del encierro es el teletrabajo y, en general, el consumo mayor de energía eléctrica dada nuestra dependencia tecnológica. Las cuentas de servicios se dispararon tal y como lo certifica el cuadro comparativo que este meme encierra.
Septiembre de desinfección
La sátira de las campañas preventivas frente a la pandemia también estuvo presente, favoreciendo las afinidades entre el alcohol antiséptico y las bebidas alcohólicas. Acá un brillante ejemplo de nuevas formas de ciudadanía responsable que emergen como resultado de la, así llamada, “nueva normalidad”.
¿Octubre?
Las nociones del tiempo fueron alteradas este año, y, de lo que parecía una situación pasajera que pasaría en cuestión de días, pasamos a un limbo cuyo horizonte todavía no podemos atisbar con algo de certezas. Los efectos sobre las relaciones interpersonales e íntimas, obviamente, fueron objeto del comentario memético.
Noviembre de D10S
Comparable solamente al fenómeno de Julio (Iglesias), la muerte o suicidio de Diego Armando Maradona cautivó a buena parte de la producción de memes certificando la estrecha asociación entre la magia de la estrella del fútbol y su personalidad pantagruélica. Acá una imagen apropiada de un cumbión mexicano que relata jocosamente una incautación de cocaína.
Diciembre de temporada
Bajo condiciones en las que no se fomentan reuniones colectivas, los rituales tradicionales de Navidad y Fin de Año van a verse modificados. Muchos pasarán solos, unas familias más o menos sitiadas que otras, y buena parte de los que viajábamos nos quedaremos acá. En las derivaciones que el humor pandémico ha desatado queda un tono ya no solamente sarástico sino caústico sobre las condiciones que nos tocó vivir a lo largo de este año, el mismo que parece prolongarse hasta nuevos horizontes.
