Acción colectiva en defensa de Palestina: el Grupo de La Haya se reúne en Bogotá Conclusiones veloces para mentes feroces.
Conclusiones veloces para mentes feroces.
Conclusiones veloces para mentes feroces.
Este martes, 15 de julio, en el Museo Nacional, tuvo lugar el encuentro “Acción colectiva en defensa de Palestina”.
En dicho espacio, que hizo parte de la agenda de la conferencia ministerial de emergencia del Grupo de La Haya, participaron Francesca Albanese, relatora especial de la ONU para los Territorios Palestinos ocupados; Jeremy Corbyn, parlamentario británico independiente; Rima Hassan, eurodiputada franco-palestina de la Comisión de Exteriores del Parlamento Europeo; y Andrés Macías, miembro del Grupo de Trabajo sobre Mercenarios de la ONU. Este es un repaso de lo discutido en el encuentro.
Con el auditorio Teresa Cuervo Borda a reventar y entre arengas en contra del genocidio por parte de la audiencia, las y los panelistas repasaron algunos puntos clave del informe “De la economía de ocupación a la economía de genocidio”, publicado recientemente por Albanese. Así mismo, reafirmaron la necesidad de profundizar el boicot a Israel y suprimir toda relación diplomática, militar o económica con dicho estado, presentaron algunas cifras del apoyo militar y económico que algunos estados siguen brindándole y señalaron la importancia del compromiso individual y colectivo de la humanidad con respecto a la lucha por la justicia y la paz en Palestina.

Así ha sido la confrontación entre Irán, Israel y EE.UU. en los últimos diez años: línea de tiempo.
Israel lleva décadas basando su economía en la ocupación de Palestina y, ahora, en el exterminio del pueblo palestino. Sin embargo, el Estado sionista no es el único beneficiario. Según el informe publicado por Francesca Albanese, relatora especial de la ONU para los Territorios Palestinos ocupados, tanto las empresas israelíes como buena parte de las grandes corporaciones multinacionales han usado el sufrimiento del pueblo palestino en pro de su propio lucro. La industria armamentista, pero también la economía de la nube, las constructoras y las big tech, entre muchos otros sectores, han aprovechado la masacre para poner a prueba sus desarrollos tecnológicos, especular con las tierras robadas y construir un sistema económico sobre cimientos manchados de sangre. Por esta razón, Albanese ha llamado al boicot de las multinacionales cómplices, pero también a la reflexión y la acción para superar al capitalismo como sistema económico imperante.
El parlamentario británico, Jeremy Corbyn, señaló que cada generación tiene su lucha y que, hoy en día, la principal causa global es la paz y la justicia en Palestina. Así mismo, aseguró que, si los gobiernos siguen desestimando el clamor de la sociedad civil, los ciudadanos “los vamos a obligar a hacer lo correcto”. En efecto, el rechazo al genocidio se volvió una cuestión moral que está articulando luchas anticoloniales, antiracistas y antifascistas en varios países. Muchos pueblos del mundo ven en el genocidio palestino una manifestación concreta del proyecto neoliberal global, mantenido por las élites de todos los países, que se basa en la explotación y la eliminación de los pueblos y la naturaleza.
Últimamente, algunos gobiernos del Norte Global y la mayoría de los medios de comunicación han comenzado a matizar su discurso con respecto al genocidio. Desde los llamamientos de España e Irlanda para establecer un embargo de armas contra Israel, hasta el uso sin ambages de la palabra “genocidio” por parte del New York Times, las condenas comienzan a proliferar. Sin embargo, una cosa es el discurso y otra los hechos. Según cifras aportadas por la eurodiputada franco-palestina, Rima Hassan, el 75% de las y los ciudadanos franceses está a favor de imponer sanciones en contra de Israel, pero, mientras tanto, los gobiernos europeos siguen apoyando militarmente al régimen sionista. También según la eurodiputada, en 2024, el intercambio comercial con la UE representó el 35% del comercio israelí, lo que demuestra la connivencia de los estados europeos con lo que Albanese llama “economía del genocidio”.
En su intervención en el Museo Nacional, Francesca Albanese señaló que países como Colombia, que hacen parte de lo que llama “la mayoría global”, deben liderar el cambio del paradigma del orden mundial multilateral. En efecto, las grandes potencias, con su apoyo a proyectos coloniales y fascistas como el de Israel, han hecho que el orden mundial basado en reglas haya perdido su legitimidad, lo que ha abierto la puerta para que el Sur Global tome la batuta y se libere del yugo de un sistema diseñado para oprimir a los pueblos del Sur, no para garantizar la paz y la justicia.
En entrevista con Cerosetenta, Susana Muhamad, exministra de medio ambiente del actual gobierno y precandidata presidencial del Pacto Histórico, aseguró que la celebración de la conferencia del Grupo de La Haya en Bogotá realza el liderazgo global que el gobierno de Gustavo Petro ha ejercido. Los y las panelistas del encuentro aplaudieron la determinación del presidente Petro y resaltaron que fue uno de los primeros mandatarios en denunciar el genocidio por lo que es, varios meses antes que cualquier alto dignatario occidental. En palabras de Francesca Albanese, “es tremendamente importante estar aquí (en Bogotá) en un momento que podría ser histórico. Tenemos la esperanza de que estos dos días impulsen a todos los presentes para que, juntos, tomen medidas concretas para parar el genocidio en Gaza y la eliminación de los palestinos”.