El músico detrás de las canciones que nadie se puede sacar de la cabeza
Hay melodías y canciones que están en la memoria de todos los colombianos. Hablamos con Nicolás Rodríguez responsable de los jingles de Águila, el cabezote de La Mega y la música incidental de Protagonistas de Novela sobre el oficio de hacer canciones inolvidables.
“Comcel te invita a festejar, amorosamente, familiarmente”. Miente quien diga que no lo leyó cantando. Igual que miente quien insista en leer “Sin igual y siempre igual” sin pensar en cerveza Águila, o “de año nuevo y navidad, Caracol con sus oyentes formula votos fervientes de paz y prosperidad” sin escuchar una trompeta en su cabeza. El culpable tiene nombre propio. Nicolás Rodríguez, compositor y productor de Universidad Javeriana, lleva más de quince años invadiendo con música el subconsciente de los colombianos.
— Soy especialista en hacer canciones con las que el público se identifique. Más que una fórmula, pienso en quién me está escuchando, dónde vive, qué edad tiene, cómo habla y cómo lo puede tocar mi letra y mi música en un momento determinado. Eso, en últimas, es lo que genera rating.
La historia comienza en 1990, cuando Nicolás trabajaba para RTI llenando innumerables listas con la música que sonaba en las novelas. Veía cada escena, escuchaba los temas y se los aprendía de memoria para poder nombrarlos luego. “Después de ver 120 capítulos uno aprende cómo es el rollo”. Luego vinieron cosas para reinados, producción de artistas y su trabajo como director musical junto al jinglero Miguel de Narváez en la empresa Sonido Comercial. Cabezotes para novelas, una maestría en NYU y el nacimiento de su empresa: Latina Music Grup.
Es trompetista, conguero y, a fuerza de insistir, pianista. En el año 2008 se ganó el premio Ascap —el Bilboard de la música para medios— a Mejor cabezote de novela con el opening de Marina, una producción de Telemundo en la que una pobre muchacha de Acapulco pierde a su madre, se ve obligada a trabajar para una familia de ricos que la maltrata, encuentra el amor de su vida y termina siendo heredera de todo.
Alegremente, celularmente
Aunque la primera versión de este jingle no fue compuesto por Nicolás, la que todos recordamos y cantamos por inercia, sí. Fue en el años 2007 y la empresa quería darle un regalo a los colombianos en navidad. Algo gigante, lleno de magia, que evocara unidad.
— Me di cuenta que el símbolo de la celebración son los niños. Hice una versión con ellos, con instrumentos pequeños como trompetas y flautas píccolo, con campanas y cuerdas que hablaran de ese mundo fantasioso que tienen.
Pero Comcel también era una compañía con un respaldo inmenso y eso había que contarlo. Coros con muchas personas, una orquesta muy grande, notas muy graves o muy agudas, y acordes muy largos hicieron el contraste. Temas al unísono y sonidos imponentes que invitaran a congregarse alrededor del mismo sentimiento: la navidad.
En tu radio, sintoniza La Mega
070 RECOMIENDA...
Nicolás Rodríguez hará parte de la Semana de la producción musical, un evento organizado por el Departamento de Música de la Universidad de los Andes.
Cuando aún no era compositor ni famoso, Nicolás concursó para sonar en La Mega con un remix de Juanes. “Me acuerdo que fue con la canción ‘Es por ti’. Yo me presenté y le entregué mi disquito a Villalobos. Gané.” Fue la primera vez que algo suyo sonó en radio y al poco tiempo, ya les estaba componiendo un jingle. El texto era simple: en tu radio sintoniza La Mega. “Lo anoté en un papelito y lo tuve casi tres meses porque todavía no me llegaba lo que quería hacer con eso”, recuerda. Como eran solo seis palabras, decidió jugar con la música. Se inventó algo que pudiera usarse en varias ocasiones, un tema de tres partes en el que la segunda imitara la música de Bach.
— No me equivoqué. Esa es la parte que más recuerdan todos. Muchos directores de emisoras me ponen como referencia el jingle de La Mega cuando me piden cosas. Les digo que lo hice yo y ninguno me cree.
Sin igual y siempre igual
— En el 2001 empecé a trabajar en Sonido Comercial. Era chiquito, no tenía celular ni podía hacer jingles. Me tocaban solo las cuñas.
Una vez en que todos los compositores estaban en Miami, fue necesario licitar para Cerveza Águila. No había quién hiciera la música y sin más remedio tuvieron que confiar en Nicolás. “Ese fue el primer jingle que yo hice, nos ganamos la cuenta por primera vez y nos la seguimos ganando por once años”, recuerda. Y aunque no toma cerveza, la versión clásica, la del mundial, la de vacaciones y todas las demás, han sido muy exitosas en su momento.
Es una canción hecha en Colombia, en el siglo XX, pero con un arreglo del siglo XVII
Caracol con sus oyentes
Cuando le preguntan por su jingle más especial, Nicolás responde sin pensar mucho que “el de Caracol, Año nuevo y navidad”. La versión original se compuso en 1955 y tenía un error de acentuación en la letra que debía resolverse: “de año nuevo y navidad, Caracol con sus oyentes ‘formulá‘ votos fervientes de paz y prosperidad”.
— Querían algo nuevo pero con la misma música. Hice un coral, como esos que uno analiza en la universidad, llamé un octeto de voces y lo grabé. Es una canción hecha en Colombia, en el siglo XX, pero con un arreglo del siglo XVII. Al otro día borré todo y volví a mezclar porque me pareció que todavía no funcionaba bien.
Nicolás compuso la música de Rauzán, de La mujer en el Espejo, Las muñecas de la mafia y Amores de mercado. De niño le gustaban los Corraleros de Majagual y ahora prefiere la música capaz de hacerlo bailar a las seis de la mañana. David Guetta, Timbaland, Celia Cruz y Joe Arroyo. Produjo grupos como Wamba, Tinto y Arsenal; escribió la música incidental de Protagonistas de novela, y el próximo lunes, abrirá la Semana de la producción musical que organiza la Universidad de Los Andes con su conferencia “Cabezotes una manera de contar una historia en un minuto”.
