Baricco se define así mismo como un “contador de historias”. Ensayista, escritor y académico. Sus obras se resumen en 14 novelas, cuatro obras para teatro, tres libros de ensayos y otros textos cortos. Es un autor famoso en Europa, pero que en Cartagena pasa desapercibido como si se tratara de un turista más. No tiene pinta de filosofo ni de pianista, los dos títulos que se ganó de joven en Turín, su ciudad natal. Creció en Italia en los años setenta y describe que su generación es una a la que le tocó vivir una nación compleja, con altas dosis de catolicismo y terrorismo. Un contexto de cierta forma semejante al de los escritores colombianos de los últimos tiempos.
En la literatura, ¿qué viene después de la guerra?
En Italia, la década del cincuenta, después de la segunda guerra mundial, fue un periodo fantástico para la creatividad. Un renacimiento para el cine, la arquitectura y la música. Como creador estás saliendo de una pesadilla. Te liberas de la obsesión que es contar la violencia, la guerra y ahora tienes mucha energía. Hay rabia pero también hay oportunidad de contar otras cosas. La guerra puede ser “sexy” para contar, pero se torna aburrida. La gente está hastiada y cansada “sick and tired”.
Baricco es el creador de la Scuola Holden, un centro dedicado al storytelling y la escritura creativa en Turín. En los últimos 20 años ha escrito ensayos sobre la realidad de las nuevas generaciones, los cambios que ha traído la tecnología y el fútbol. También ficciones sobre desencuentros, personajes erráticos, ambientes opresivos. Fue invitado al Hay Festival de Cartagena a propósito de su ultima novela La Sposa giovane.
Uno de sus libros más populares es Los Bárbaros (2006). Se trata de una compilación de ensayos sobre los cambios culturales y la nueva relación entre las personas, los bienes de consumo y la cultura. Para Baricco el hombre busca las experiencias, la espectacularidad y lo superficial en un mundo continuamente cambiante. Baricco es un defensor de la mutación o el asalto a las aldeas culturales clásicas por quienes él llama los “bárbaros” —o sea nosotros— que toman los bienes que antes estaban reservados para el consumo de un grupo selecto de personas. Es un escritor que con una muy buena pluma se ha dado la tarea de defender lo que está pasando con las nuevas generaciones que están en Google y que toman vino californiano. Las creadoras de nuevas formas culturales más incluyentes y más diversas, que otros autores como Mario Vargas Llosa consideran banales. Sus ideas se oponen de muchas formas a las del libro La civilización del espectáculo (2012) de Vargas Llosa, en las que el escritor peruano lamenta la desaparición del “intelectual” y el hecho que hoy todo pueda ser cultural, de tal manera que ya nada lo es.
¿Cómo ve a los Bárbaros vs. La civilización de espectáculo?
Una muy buena comparación. ¿Quién gana? Me pregunto, ¿quién gana? Los bárbaros hablan sobre una buena mutación, estoy fascinado con la nueva generación y su cultura. Mario Vargas Llosa es una gran persona y un escritor formidable. Son dos posiciones inteligentes y desafiantes. No hay una mejor que otra.
Baricco es de la generación que vio llegar el hombre a la luna por televisión y que se habituó a una relación muy clásica con los medios de comunicación
¿Cómo entiende la relación de internet con los medios?
Pienso que la televisión es un juego para la gente vieja e internet es el juego de los jóvenes. En Europa está cambiando lentamente… más lento que en otros lugares. Sin embargo, en 20 años, la televisión paga y Netflix habrán hecho de la televisión otra cosa. Ya no hay citas con la pantalla. Así como la conocemos, se va acabar. Lo interesante es que la televisión está controlada por el poder político y la web es mucho mas difícil de controlar. La televisión es un instrumento de poder. La web no se puede controlar tan fácil y por eso la batalla es tan lenta. El poder sigue manteniendo vigente la tv pero tarde o temprano será imposible mantener la vaca adentro. La televisión será solo una pantalla.
Su perfil de wikipedia en español lo define como periodista, escritor, novelista y guionista. ¿Eso lo define?
¿Por qué no? La definición mas puntual sería storyteller yo escribo para televisión, teatro, cine, música y literatura. Mi trabajo favorito es escribir novelas.
También dice que no le gustan las entrevistas. ¿Por qué?
Me gusta leer entrevistas y hacer entrevistas pero no ser entrevistado. Cuando me preguntan por mi escuela está bien, pero si escribí una novela no tengo más que decir sobre ese tema. No tengo más palabras, nada que agregar. Todo está en el libro y no creo que haya necesidad de volver. Y no creo que sea interesante para los lectores saber sobre mi vida privada, mi familia, mi niñez. Creo que eso es perder el tiempo.