¿Qué fue lo que consiguió Petro en la costa? ¿Qué le faltó a Fajardo? ¿Los votantes se van a quedar con el ni-ni de sus candidatos derrotados?
No le creíamos a las encuestas. Pensábamos que no medirían la maquinaria ni la mermelada —sobre todo aquella de la costa caribe, la de los Char. Pensábamos que Vargas Lleras terminaría, al menos, en el tercer puesto. Pensábamos que sus años en el ministerio de vivienda y repartición de vivienda de interés iban a ser campaña suficiente pero sólo sacó el 7.27 % de los votos. ¿Dónde quedó entonces esa maquinaria? ¿Será que la maquinaria se va con quién está penetrando en las encuestas?
Cabe esperar que Petro y Duque moderen sus discursos para sumar los votos del centro. Se puede prever que Duque va a recibir los votos de Vargas Lleras. Pero no es tan claro para dónde irán los votos de Fajardo y de De la Calle. Ambos candidatos anunciaron que dejarán a elección de su electorado la decisión. La abstención y el voto en blanco pueden entrar a jugar un rol importante en la segunda vuelta. Los votantes parten de que Duque y Petro son extremos y rechazan partes de sus personalidades y programas de gobierno. La decisión de ese electorado no es tan obvia y lo más seguro es que estará dividida.
Fajardo logró el 22 % y ganó en la ciudad más representativa: Bogotá. Le faltó poco para llegar a la segunda vuelta, solo le faltaron 260 mil votos, menos que lo sacó el voto en blanco, menos que los que sacó De la Calle, con quien le faltó ser más abierto ante una posible alianza. Sus intervenciones en los debates presidenciales y en entrevistas, pudieron restarle apoyos. En algunos le faltó sentar una posición clara y en otros, que eran de su experticia, demostró desconocimiento. Por ejemplo, se rajó ante una pregunta sobre el paro de los maestros.
