‘He estado en muchos incendios y en este en particular la ciudadanía nos ha apoyado mucho’: Elkin Rubiano, bombero de Bogotá
Entrevista con Elkin Rubiano, del cuerpo de bomberos de Bogotá, con nueve años de servicio. Durante 10 días hizo parte del equipo que logró controlar el incendio en El Cable, en los Cerros Orientales.
por
Bárbara Fonseca
01.02.2024
Todas las fotos por Bárbara Fonseca.
Elkin Rubiano, pertenece al cuerpo oficial de bomberos y desde hace nueve años desarrolla sus operaciones en la estación de bomberos de la localidad de Puente Aranda. La trayectoria de Rubiano en este servicio comenzó en 2015, influenciado en parte por su legado familiar. Y aunque sus labores en el cuerpo se han especializado en la búsqueda y rescate de animales –específicamente como guía canino para la búsqueda y rescate de seres vivos en estructuras colapsadas– desde la mañana del 22 de enero fue parte del grupo de más de 260 bomberos, militares y rescatistas que por más de 106 horas trabajaron cuerpo a cuerpo en las labores de contención del fuego en El Cable, uno de los Cerros Orientales que más sufrió las llamas.
¿Cómo ha sido el trabajo en estos días? ¿Cómo ha estado el ánimo?
El trabajo ha sido exigente, a nivel físico y mental. En emergencias en las que la naturaleza es la afectada, ella tiene una fuerza muy grande sobre nosotros. Pero nuestra fortaleza mental es de notar. Ahorita viste a Cañón, mi compañero, quien, a pesar del accidente por su reciente golpe en el pulmón derecho, está contento y animado. Y si los jefes operativos lo envían ahorita al cerro, lo harán con toda su alegría. Entonces mentalmente somos fuertes, la experiencia nos da ese margen y de cierta manera lo disfrutamos. Siempre tratamos de dar lo mejor de nosotros en cada uno de los servicios. Ánimos, siempre tenemos. Realmente esta profesión es de mucha vocación.
¿Qué le pasó a su compañero?
¿A Cañón?
Sí.
Cañón estaba desplazándose por la parte alta del cerro para intentar controlar algunos incendios de manguera. Se acercó mucho al filo de la montaña, perdió su estabilidad y rodó varios metros abajo.
Fue atendido y sacado por los mismos compañeros que estaban con él, y fue llevado al Puesto de Mando Unificado (PMU) donde le dieron atención primaria. De ahí lo desplazaron al hospital donde le dieron el dictamen y la incapacidad. Ya se encuentra bien y a la espera de un nuevo llamado.
¿Todos ustedes están preparados para el manejo de primeros auxilios?
Sí, nosotros tenemos cursos de soporte básico vital. Muchos de nuestros compañeros tienen especialización en tema de enfermería: les gusta, lo estudian por su lado. O, antes de ser bomberos, vienen de trabajar de pronto en ambulancias, en hospitales.
¿Se sentía preparado para atender esta emergencia?
Estaba preparado. Tengo el conocimiento básico, he recibido el conocimiento específico e incluso en diciembre hice el curso de uso y aseguramiento efectivo del agua. Este conocimiento lo estuve aplicando estos días en el cerro El Cable.
¿Cómo ha dificultado el humo el trabajo en el cerro El Cable?
Dificulta tanto el tema de respiración como la visibilidad. Porque el humo es denso sobre todo en las partes de áreas vegetales. En estas zonas, el humo tiende a ser muy blanco, como niebla espesa caliente. Entonces este humo no nos deja un alcance visual para poder nosotros determinar a veces rutas de evacuación, rutas de desplazamiento y nos toca ir con mucha precaución.
¿Cómo logran mantenerse hidratados?
Tenemos Camel Packs, maletas con bolsas de agua y una manguerita con la que nos hidratamos. Cuando uno va a empezar a subir, nos entregan botellas de agua, ya usted determina en qué bolsillo las guarda. Así tendríamos hidratación por cierto tiempo. Yo ya he estado en varios incendios forestales grandes y este tiene la característica particular de que la ciudadanía nos ha apoyado mucho en las partes más altas. Han hecho llegar sueros, geles hidratantes, agua. Entonces, realmente ha sido muy sencilla mantener cierta hidratación y alimentación durante la asistencia.
¿El calor no afecta el agua que carga en su kit?
Por un largo periodo, sí. Pero a veces uno ya tiene sus tips: yo por lo menos pongo a congelar hielo y entonces meto el hielo en la bolsa, meto agua y a medida que se va derritiendo el hielo pues va manteniendo cierta temperatura del agua con la que me puedo hidratar.
Los cerros implican una geografía de difícil acceso. ¿Cómo logran subir ustedes al punto del incendio?
Inicialmente se busca llegar hasta cierto punto seguro con los vehículos y de ahí en adelante a pie. No se busca poner los vehículos en primera instancia, porque son nuestros recursos hídricos y [los necesitamos] para atender otras emergencias. Entonces los que van avanzando lo hacen a pie y van abriendo camino por sí toca correr algún árbol caído…
¿Qué herramientas utilizan?
Machete o motosierras es lo que más utilizamos para despejar caminos. Y pues a medida que vamos viendo que el camino es seguro, nuestros vehículos van subiendo.
¿Y para luchar contra las llamas?
Herramientas manuales como los bates de fuego, que son cauchos como palas: tú lo que haces es golpear la llama y estás cortando el oxígeno para que esa llama deje de alimentarse. Tenemos machetes, tenemos mancaus, que son unas especies de hachas especializadas en los grupos forestales para poder hacer tanto corte como remoción de las partes de tierra, porque muchos de los incendios forestales también se desplazan vía subterránea sin que lo notemos.
¿Vía subterránea?
Se van prendiendo bajo tierra ciertos materiales por debajo de los visibles. Lo que llamamos el colchón de pino. Entonces tú puedes ver el colchón de pino intacto, pero por debajo se está moviendo la temperatura, los humos.
Realmente sí, el tipo de vegetación hace que varíe la complejidad de los incidentes. Y el hecho de que la mayor parte de la vegetación fuera pino hizo que el fuego fuera más difícil de contener. El pino absorbe el calor fácilmente y así mismo lo propaga.
¿Cómo suben el agua hasta los cerros?
Los vehículos que tenemos son: tanto carrotanques, como vehículos de máquinas extintores. Estos tienen bombas hidráulicas que impulsan el agua, entonces uno hace unos cálculos de presión y sabe hasta dónde va a lanzar la fuerza de esa máquina. Por ejemplo, en el cerro El Cable tuvimos: primero, en la parte baja el carro tanque, luego seguía la MB21, luego el MB42, luego el MB45…o sea cuatro vehículos. Posteriormente, ya seguía una camioneta con una motobomba Fox, que es una de las mejores motobombas que tenemos y ya en la parte superior había motobombas más ligeras que son más fáciles de transportar por los bomberos y allá abastecen nuestras piscinas, los contenedores y con las bombas impulsaba el agua hasta la punta de los incendios.
¿Cómo coordinan ustedes lo que está sucediendo en tierra con los helicópteros y las descargas de agua?
Lo primero es que ellos se basan en las coordenadas que nosotros vemos, porque pueden ver el humo desde la parte superior, pero muchas veces los árboles no les dejan ver qué tan complejo está ahí en tierra. Y a veces hay otros puntos donde hay mayor temperatura. Entonces ellos se guían por las coordenadas que nosotros les enviamos. Y previamente, a la descarga, vía radio, nos avisan para movernos, porque al suceder ese cambio de temperatura tras la caída del agua va a salir humo –uno muy caliente y tóxico– este es un vapor de agua y nos puede lastimar o nos puede dificultar la respiración.
¿Cuánto tiempo tienen para hacer este traslado a la zona segura antes de una descarga?
Es una cuestión de dos o tres minutos máximo. Simplemente uno se desplaza cuando ya tiene la señal de que se va a realizar la descarga en la radio. Cuando uno llega y hace una evaluación del área donde va a trabajar. Uno monta por protocolos de seguridad las rutas de evacuación. No se puede perder tanto tiempo.
¿Cómo monitorean el incendio? Cuando le dicen a la opinión pública que el incendio está controlado en un “80%”, ¿cómo estiman ese porcentaje?
Porque uno evalúa el material combustible y ya sabe que está lo suficientemente húmedo. Uno crea también lo que se llaman las líneas de defensa en la tierra y uno sabe que el incendio ahí no va a pasar. Entonces uno sabe que tiene esos alcances, ese control del incendio hasta un cierto porcentaje. Pero básicamente es por el esquema de humedad correspondiente en cada zona. Uno ya mira las características del material combustible, sea el árbol o sea el pino. Mira qué tan húmedo están esas zonas o si ya está apagado.
¿Qué es la línea de defensa?
Uno crea la línea de defensa con una herramienta manual. Se hacen unas zanjas profundas y anchas. Entonces lo que uno busca es que el incendio o el fuego no tenga más material combustible para alimentarse. Muchas veces las líneas de defensa son caminos o carreteras que ya están ahí. En pocas palabras, la línea de defensa es ponerle un límite al movimiento del incendio.
¿Cómo saben que el humo o la radiación no les ha afectado?
Uno se trata de cuidar con las máscaras, las mascarillas, los filtros. No es un secreto para los bomberos que a largo plazo vamos a tener afectaciones a la salud. Está científicamente comprobado que nosotros a larga edad vamos a sufrir de los pulmones. Entonces para los incendios estructurales se usan máscaras que no permiten el ingreso de humo. Pero en el tema de los forestales uno tiene la percepción de lo que uno conoce de su cuerpo, si me duele algo, si tengo carraspera, si siento ardor en la garganta. Ahí es cuando solicitó la revisión.