Uribe, Cine Colombia y la censura de La negociación
Por un trino de Uribe, el documental La negociación de Margarita Martínez podría nunca pasar por las salas de Cine Colombia, dueño de la mayoría de las pantallas de cine del país. Estas son las tres cosas que están en juego.
[N. de la E.: Esta historia se actualizó tras la publicación en la noche del martes del comunicado oficial de Cine Colombia ]
El hashtag #IreAVerLaNegociación es tendencia en Colombia. Ocurrió luego de que el documental La Negociación de Margarita Martínez, que durante seis años siguió las negociaciones de paz en La Habana, fuera tema de varios tuits de Álvaro Uribe. Luego del trino, Cine Colombia dijo que “reconsideraría” su estreno en salas.
Según el presidente de Cine Colombia, Munir Falah, “quieren tomar una decisión sensata, que sea la mejor para el país”. Su intención, dijo, es unificar al país y no dividirlo. En todo caso, la decisión se dio luego de este trino del expresidente Álvaro Uribe que están replicando varios miembros del Centro Democrático.
“Yo lo que pido es que Cine Colombia me permita mostrar mi documental para que se discuta en democracia”, dijo Margarita Martínez a Cerosetenta. Aunque sí ha tenido mucha publicidad por la polémica que se desató esta mañana, aún no tiene más ofertas para presentarlo por lo reciente de la decisión de Cine Colombia. “Hay que esperar”, dice.
En la noche del martes, Cine Colombia finalmente publicó un comunicado en el que aseguró que sí va a proyectar el documental en sus salas. Aún así, la decisión de suspenderlo temporalmente mostró estas tres cosas:
Un ataque a la libertad de expresión
Para Pedro Vaca, director de la Fundación para la Libertad de Prensa, la intención de callar un documental como La negociación es alarmante: “Este tipo de documentales sirven para fomentar el debate público. La democracia es controversia y debate. Este mensaje lo que muestra es que hay poderes más grandes que limitan el debate y asfixian el debate público”.
Uribe acusó al documental, en el que es presentado como uno de los “enemigos” del proceso, de mentiroso y de irresponsable. Martínez, sin embargo, le recordó al senador en un trino que durante el proceso de rodaje lo invitó en varias ocasiones a participar y él se negó.
¿De qué se sorprenden?”, se pregunta el crítico de cine Pedro Adrián Zuluaga. “Cine Colombia es un exhibidor muy obsecuente con el poder y de talante conservador. Así ha sido siempre: no le gusta incomodar a nadie, ni a sus espectadores ni a las élites a las que pertenece.
“Cuando se niega o cuando se rechaza oportunidad para hablar”, asegura Vaca, “el silencio tiene una consecuencia: Uribe no puede alegar que su voz no esté como forma de desacreditar la validez del documental luego de que el mismo se negó. Creo que eso es democráticamente desleal”.
Para Vaca, voces como las de Uribe puede incluso generar un problema de seguridad: “La voz de Uribe es una voz muy potente y este mensaje puede ser entendido por parte de sus seguidores de manera errada y puede poner en riesgo la seguridad de las proyecciones que tenga el documental”.
Aunque al finalizar el día Cine Colombia dijo de manera oficial que tomó la decisión de estrenar el documental, hasta las 3:00 P. M. era imposible comprar boletas en la página de Cine Colombia y La negociación desapareció temporalmente de la sección de películas en cartelera. Una hora después se reactivaron ambos servicios.
Los temas que no le gustan a Cine Colombia
La duda que tuvo –al menos por unas horas– Cine Colombia de proyectar el documental La negociación, mostró que hay algunos temas que no le gustan a la compañía.
“¿De qué se sorprenden?”, se preguntaba el martes el crítico de cine Pedro Adrián Zuluaga. “Cine Colombia es un exhibidor muy obsecuente con el poder y de talante conservador. Así ha sido siempre: no le gusta incomodar a nadie, ni a sus espectadores ni a las élites a las que pertenece.”
Por eso, dice, Cine Colombia se negó a pasar un comercial que promocionaba No hubo tiempo para la tristeza de Patricia Nieto y Jorge Mario Betancur —y comisionado por el Centro Nacional de Memoria Histórica— un documental sobre el conflicto armado en el país. Cine Colombia nunca proyectó el avance publicitario del documental.
“No les gusta molestar a su público con temas que desafíen o que proponen la transformación social con temas como la paz o los derechos de las minorías. Es una política institucional. Lo que les importa es hacer dinero vendiendo ideas que no le hacen daño a nadie, neutros, que no los haga comprometerse con estas discusiones”, dice Zuluaga.
El efecto Streisand no necesariamente beneficia a La negociación
Lo que pasó el martes con La negociación es para Pedro Vaca de la FLIP la muestra del «Efecto Streisand», es decir, lo que ocurre cuando un intento de censura consigue el efecto contrario y termina siendo publicidad. Desde que se conoció que Cine Colombia se estaba tomando un tiempo para decidir si proyectaba o no el documental de Martínez en sus salas, las redes sociales se volcaron para apoyar La negociación.
“Esta polémica va a terminar favoreciendo el documental. Estoy seguro que con esta decisión, más el trino de Gustavo Petro, más la polémica en La W, el documental va a encontrar salida por otro lado”, dice Pedro Adrián Zuluaga.
El efecto publicitario es real. De hecho, cuando Cerosetenta habló con Margarita Martínez ella estaba contenta por el debate que se ha generado alrededor de su película. Sin embargo, reconoce que en la práctica la mayor publicidad no necesariamente significa un aumento en la difusión porque en Colombia hay un déficit de salas de cine.
Los documentales se ven poco y no ayudan los horarios a los que los ponen”, dice Margarita Martínez. “Yo lo que quiero es que haya conocimiento de lo que nos pasó.
Algo similar opina Pedro Vaca, director de la Fundación para la Libertad de Prensa. “Esa atención que está recibiendo este documental a causa de esta controversia se puede ver opacada por limitaciones físicas de dónde proyectarlo. Cuando hay un déficit de oferta de salas, y el actor más poderoso es quien se plantea no presentar el documental, la atención y publicidad que ha ganado termina opacada por limitaciones físicas. Si Cine Colombia decide no presentarlo, ojalá aparezcan distintos auditorios donde se pueda ver para que haya una sana controversia sobre su contenido”, explica Pedro Vaca de la Flip.
Aunque finalmente la compañía Cine Colombia decidió estrenar el documental como había dicho que lo haría, aún con ellos a bordo, la distribución de La Negociación es complicada. La proyección está disponible sólo cuatro días –del 29 de noviembre al 2 de diciembre– casi que en horario matiné, a la 1 y las 3 de la tarde.
“Los documentales se ven poco y no ayudan los horarios a los que los ponen”, dice Margarita Martínez. “Yo lo que quiero es que haya conocimiento de lo que nos pasó”.
Aún así, tras la decisión de Cine Colombia, el documental se verá en sus salas de cine y podrá darse ahora sí la discusión sobre la historia que cuenta La negociación.