Música nacional que deberías estar escuchando: abril 2022
Cumbia punk dedicada a la movilización social, nuevo disco de una ídola pop, rock tropicalero para darse en la cabeza y el regreso de uno de los grandes dúos del rap nacional entre lo mejor de abril.
por
Cerosetenta
01.05.2022
Desde principio de año estamos hablando de la reactivación de la música en vivo en el país. Festivales, conciertos de talla mundial y toques locales de miércoles a domingo son el panorama común en Bogotá. Incluso da la impresión de que el público está copiando más a asistir a estos eventos que antes de la pandemia. Por poner un ejemplo: el sábado 23 de abril hubo por lo menos 37 conciertos solo en la capital, como contabilizó Álvaro de Cadencia Podcast, uno de los proyectos más juiciosos de difusión cultural independiente en la ciudad. Ahora, si ponemos el ojo en shows grandes, en abril tuvimos anuncios como el de Rosalía, Guns n’ Roses, Arctic Monkeys y el de Daddy Yankee, que será de los primeros actos que llegarán al Coliseo Live, la esperada nueva arena ubicada en la salida de la calle 80.
Pero así como destacamos los logros de los artistas nacionales independientes en Colombia, es importante poner la mirada sobre lo que también están haciendo afuera. Diamante Eléctrico, por ejemplo, que tuvo cuatro nominaciones en los Grammys anglo —donde perdieron una estatuilla frente a un álbum de covers de Juanes—; y Diana Burco y Chontadelia, elegidos por el programa Center Stage de la embajada norteamericana parar girar un mes por Estados Unidos, tiempo en el que llevaron la música colombiana por tarimas en Nueva York, Nueva Orleans, West Palm Beach, Lexington, entre otras ciudades.
Estos son los lanzamientos nacionales independientes que destacamos de este mes. Póngase los audífonos.
Kokodrilo – Silicon Bala
La descarga tropical-punkera de los Kokodrilo llega a uno de sus puntos más altos con el estreno de Silicon Bala, su segundo álbum de estudio. El título es una alusión a la movilización social y, en ocho cortes, el disco hace una crítica a las élites políticas y un señalamiento a los responsables de las desapariciones de esta desangrada nación. Un disco para bailar y cabecear en igual medida.
Elsa y Elmar – ya no somos los mismos
Elsa lo volvió a hacer. Después de varios meses de adelantos y un par de visitas a Bogotá en las que dejó clarísimo por qué es una de las voces más importantes del panorama pop latino, la bumanguesa radicada en la CDMX nos pone a escuchar un disco con el corazón en la mano. En ya no somos los mismos confluyen baladas crudísimas, pop electrónico, trap romanticón y hasta bachata, poniendo sobre la mesa la versatilidad de una artista de talla global.
Venados del Alba – Hegemonía del mal
Salidos de la vena de la experimentación rockera capitalina, los Venados del Alba presentan un acercamiento refrescante a la tropicalia nacional. Tintes champetúos, salseros y cumbieros en la batería de Andrés Gualdrón van armando el rompecabezas de este disco que desafía al oído por su complejidad estructural y estridencia. A la vez, Hegemonía del mal referencia —intencional o no intencionalmente— a Los Pirañas, una banda referente del movimiento tropicanibalista bogotano.
Gordo Sarkasmus – Niebla
Las cosas por su nombre: Gordo Sarkasmus volteó la historia del rap de acá con Herejías, su disco de 2015 cuyas rimas y beats trascendieron públicos y fronteras. Después de siete años de largos momentos de incertidumbre sobre su regreso, el dúo compuesto por Granuja y ZetaZeta vuelve a la carga con un larga duración estallado de boom bap, de oscuridad condensada en las líricas y de los beats crudos y callejeros que salen de las manos de Granuja. Este es un flashback a lo que alguna vez fue Moebius, colectivo rapero de Medellín.
Brina Quoya y Spektra de la Rima – “Aquí siendo fuego”
Brina, que nos tiene acostumbrados a un nivel de producción e interpretación superlativa, se juntó para esta canción con Spektra de la Rima, una de las raperas más reconocidas del país. El resultado es fuego puro, un tema con base de trap y unas armonías vocales finísimas que son testimonio de un poder incontenible.
Diamante Eléctrico – “4 del 20”
Abril trajo el 420, día mundial de la marihuana, también una nueva rola de Diamante Eléctrico que se tenían bien guardada para esa fecha. Aunque en el video se ve a Juan Galeano fumándose un porro, realmente no es un homenaje a la bareta. Más bien es una despedida bien sentida entre dos personas que se aman. Este es el primer adelanto de su nuevo álbum.
Realidad Mental Ft. La Muchacha – “La Chaguala”
Pocos artistas contemporáneos le han sabido cantar a los dolores de esta patria como La Muchacha, la cantautora manizaleña detrás de temas como “No azara” o “La sentada”. En esta colaboración con el MC capitalino Realidad Mental explora por primera vez en el rap. El resultado son versos que encarnan varios de los tantos dolores que se resienten en este país.
Junior Zamora – “MALA SANGRE”
Por la línea de artistas alternativos anglo que están rompiendo el mainstream global, como Daniel Caesar o H.E.R, el caleño Junior Zamora está trayendo el R&B íntimo y profundo a la colada de la música nacional. La apuesta de este sencillo es una voz que pega directo al cora acompañada de una instrumentación conmovedora, una fórmula que probablemente pronto lo lleve a tarimas masivas.
Felipe Orjuela y la Nueva Estudiantina Electrónica – “El Motilao”
Después de sus andadas con Aguas Ardientes, Los Cotopla Boyz y un disco en solitario que nos abrió los oídos a la cumbia continental, el bueno de Felipe Orjuela presenta su primer sencillo junto a La Nueva Estudiantina Electrónica, una agrupación cuyo nombre hace honor a los populares conjuntos colegiales de música colombiana a mediados del siglo pasado. “El Motilao” es una radiografía cumbiera de la chueca realidad colombiana, en la que cualquier ídolo es héroe o villano.
Margarita Siempre Viva – “Mi barco”
Este es el último adelanto previo al lanzamiento de Un lugar más cierto, su nuevo álbum de estudio programado para el 6 de mayo. “Mi Barco” bien pudo haberse colado en el tracklist de sus primeros EPs, cuando producían en casa y montaban sus canciones a YouTube sin esperar mucho. Este es el sonido Margarita clásico que nos hizo enamorarnos de la banda de Bello pero, esta vez, con el nivel de composición y producción de una banda que hoy es una de las más grandes en Colombia.